2010-08-22

La puerta estrecha

Cord21, la puerta estrecha, 22 de Agosto de 2010

Is 66, 18-21: De todos los países traerán a todos sus hermanos
Salmo 116: Vayan al mundo entero y proclamen el Evangelio
Heb 12, 5-7.11-13: El Señor reprende a los que ama
Lc 13, 22-30: Muchos intentarán entrar y no podrán


JESÚS DE NAZARET continúa su viaje a Jerusalén hacia la cruz, pasando por pueblos y aldeas en los que enseñaba. En este contexto alguien le pregunta: Señor, ¿son pocos aquellos que se salvaran? Jesús responde que para salvarse se necesita hacer un esfuerzo por entrar por la “puerta estrecha”, es decir, hacer un esfuerzo significativo por construir el Reino de Dios lo cual de por sí es complicado. Y más difícil cuanto más se acaparan los primeros lugares del Reino. Muchos fariseos y doctores de la ley pensaban que ese esfuerzo no les era necesario porque tenían ya segura la salvación. ¿Cuál será ahora la puerta ancha en el ámbito eclesial y social? El individualismo pastoral y el creciente estado de inseguridad y violencia me parecen las puertas malévolas más atrayentes en la actualidad. El primero se refleja en la falta de compromiso por el Reino en la mayoría de los bautizados; el segundo es consecuencia entre otros factores por el monopolio-pobreza y por un estado rebasado.

APARECIDA dixit que en Jesucristo, el Reino de Dios que transforma la Iglesia y la sociedad, somos hijos dignos de Dios, con los mismos derechos y deberes (AP 382). Y por tanto, ser discípulos y misioneros de Jesucristo nos lleva a promover la dignificación de todo ser humano, y a trabajar junto con los demás ciudadanos e instituciones para ello. Urge crear estructuras que consoliden un orden social, económico y político en el que no haya inequidad y donde haya posibilidades para todos, y que promuevan una buena convivencia humana que impidan la prepotencia y faciliten los consensos sociales (AP 384).

QUÉ LES PARECE si nos proponemos hacer el esfuerzo en trabajar en comunión a favor de todo el cuerpo de Cristo más allá de mi grupo o pequeña comunidad, más allá de mi movimiento o asociación, de mi capilla, de mi parroquia... Qué les parece si nos proponemos hacer 5 minutos diarios de oración por una persona que haya caído en la delincuencia y/o corrupción por su liberación de tal esclavitud del mal. Y finalmente, para los pudientes, qué les parece hacer el esfuerzo por promover integralmente a una persona o familia para que salgan adelante en este valle de lágrimas.

Agustín, Pbro.

2010-08-03

LA AVARICIA

Ciclo COrd.18, La avaricia, 1° de Agosto de 2010
¿Para quién serán todos tus bienes? (Lc 12,20)

JESÚS DE NAZARET se da cuenta cómo entre los mismos hermanos se da la avaricia al no querer compartir la herencia, y aprovecha para narrar la parábola del hombre avaro. Personaje que tuvo una gran cosecha y pensaba en construir graneros más grandes para acumular y darse a la buena vida. Sin embargo, esa noche iba a morir. Jesús, enseña a la multitud que la vida no depende de la abundancia de los bienes que se tenga. ¿Sabe usted que en México vive el hombre más rico del mundo? ¿Sabe usted que en México hay alrededor de 10 hombres con más de mil millones de dólares? ¿Qué opina de la acumulación de dólares de estas personas? Por otra parte, ¿conoce usted el saldo económico de su parroquia y de su diócesis?
APARECIDA dixit que la vida sólo se desarrolla plenamente en la comunión fraterna y justa (AP 359), pero la cultura dominante de la acumulación y el consumismo hedonista e individualista (AP 540 y 357), ha dado como resultado condiciones de exclusión para muchas personas, lo cual contradice el proyecto del Padre. Por esto el amor a Dios nos invita a todos a suprimir las graves desigualdades sociales y las enormes diferencias en el acceso a los bienes (AP 358). El Señor nos previene sobre la obsesión por acumular (Mt 6, 19; 16, 26; AP 357), y nos enseña que lo más importante es el Reino (Lc 12, 31).
QUÉ LES PARECE si nos proponemos promover la cultura del compartir y hacer un gran esfuerzo en vivir un estilo de vida sobrio, ya que además de seguir los pasos de Jesús, se nos recomienda para ir al encuentro de los hermanos que viven en la indigencia (AP 540). Qué les parece si hacemos el intento de comunicarnos con los hombres más ricos de México para dialogar y emprender proyectos creativos para restaurar la vida de millones de excluidos en México. Invitarlos a que no inviertan su capital en acciones especulativas o acumulativas sino en obras de solidaridad y misericordia (AP 404). Ciertamente no les afectará gran cosa y si ganarán mucho.

Agustín, Pbro.